[…]
– Necesitaré tres días -dijo-. Estoy completamente seguro.
Cronista palideció.
-Pero el conde…
Kote hizo un ademán de desdén.
-Nadie necesita tres días- dijo Cronista con firmeza-. He entrevistado a Oren Velciter. A Oren Velciter, nada menos. Tiene ochenta años, pero es como si hubiera vivido doscientos. Quinientos, si contamos las mentiras. Él fue a buscarme –añadió con un énfasis particular.- Solo tardó dos días.
-Esta es mi oferta- se limitó a replicar el posadero-. O lo hago bien, o no lo hago […]
-Tardaré tres días en contarte la historia- lo interrumpió Kote-. Empezaré mañana. Eso es lo que te estoy diciendo.
-Si es la única manera, acepto.
-Me alegro.- El posadero se relajó y esbozó una sonrisa-. Pero dime ¿de verdad es tan inusual lo de los tres días?
-Sí, tres días es bastante raro. Pero… -su tono de voz ya no denotaba tanta altanería-. Pero… -hizo un gesto para expresar lo inservibles que eran las palabras- eres Kvothe. […]
-Sí, supongo que sí – dijo Kvothe con una voz de hierro. […]
Aquí termina el primer día de la historia de Kvothe. Continuará…
Jo, jo, jo, no tenéis ni idea de lo que habéis hecho, insensatos… Me habéis enganchado a otra saga.
En 37 días estoy en casa, un beso a los que me regalaron el libro sin pensar en las consecuencias.
jajajaja bueno eso significa que el libro te ha gustado muchiiiiisssmmooooo asike...me alegro
ResponderEliminary el resto ya compralos tu ehhh jajajaja